miércoles, 6 de octubre de 2010

SOLOS Y SOLAS...

Por qué no amamos a los que nos aman?


En el mundo cada vez hay más gente sola, y me incluyo. Hemos progresado en tecnologías, en comunicación de alta gama, tenemos celulares que nos comunican en cualquier momento con otra persona, atrás quedaron las cartas escritas a mano que llevaba el cartero casa por casa, ahora hay e-mails y todo es mucho más rápido. Inventaron autos cada vez más buenos y veloces,  se lograron enormes progresos en cuanto a la lucha contra diferentes enfermedades, la ciencia ha avanzado. Sin embargo… la soledad sigue siendo un mal  difícil de curar en pleno siglo XXI
¿Quien no tiene en la familia, entre amigos, en el barrio personas que no  lograr formar una pareja?  Yo misma desde que he enviudado hace 10 años no he logrado concretar una relación  que perdure en el tiempo. Sea por la causa que fuere. En mi caso soy una mas de las tantas que fueron abandonas justito ahí, en el momento preciso en que una más enamorada estaba y ya creía tocar el cielo con las manos. Pero bueno no soy la única que vivió esta experiencia frustrante. Cada vez me encuentro  con más gente sola. Basta ingresar a las diferente salas de chat, si utilizamos este medio  y veremos a una cantidad de personas en la misma situación que una, esperando  reencontrar al “príncipe azul” y a la vez ( tanto hombres como mujeres) esquivando el compromiso de una cita o de un encuentro real, mintiendo descaradamente, o intentando a veces únicamente volcar toda la agresión que llevan adentro  a través de escritos groseros e insultantes y no hablo de hombres solamente, sino también de mujeres con un vocabulario de cloaca.
Por qué sucede esto?  Estamos solas/os, nos duele esto, queremos encontrar a alguien para compartir nuestros días pero actuamos de tal modo que en vez de un acercamiento logramos el rechazo de la otra parte..
En otros casos, sucede que tenemos a varios candidatos cerca, aparentemente muertos de amor por nosotras y nos hacemos las distraídas…seguimos de largo mientras se nos va la vida…
Por qué no amamos a los que nos aman?
Me lo he preguntado tantas veces!
En mi caso, siempre llego a la misma conclusión: el amor verdadero, ese que nos hace vibrar, el que nos hace “ciegas, sordas y mudas, ese que nos transforma la vida, que nos nos hace soñar despiertas, para mi se dá una sola vez en la vida, no se olvida y nos marca para siempre, para mal o para bien, depende como vayamos resolviendo las dificultades, en mi caso: el abandono…hacer el duelo, se llama ahora…
Amé una sola vez en mi vida, con todas mis fuerzas , “alma, corazón y vida” puse en ello. Pero fue una historia que terminó sin “terminar”…sin explicaciones, sin respuestas, sin “adiós”. Increíble? Pero real.
De pronto tuve todo lo que pedí y soñé, y así tan de pronto, me quedé sin nada. Con las manos vacías, sin mi hombre, sin su amor, sin las miles de promesas que me hizo. Me quedé a oscuras. Se apagó la luz. Me perdí. No encontraba el camino de regreso hacia la mujer sonriente, alegre, segura, confiada que era “Yo misma “ antes sin él…
Por suerte el tiempo va sanando heridas y el aferrarse a Dios junto a todas las herramientas que puso a mi alcance para  recomponerme ya voy saliendo a flote lentamente, emergiendo como el ave fénix de sus cenizas…
De esa vivencia en adelante, ya no pude vivir, o experimentar un sentimiento tan intenso como el vivido.
Creo en el amor a primera vista, será porque fue eso lo que yo viví.
Si en el primer contacto o comunicación no se me mueve una fibra del alma, del cuerpo, del corazón es inútil continuar pretendiendo que  “ tal vez con el tiempo logre amarlo…”
Es mentira eso, no es así. No lo fue nunca para mi y es una utopía que el hombre al que dije “no” piense que si le doy una oportunidad, con el tiempo lograré amarlo…
La verdad es que yo misma pensé en un momento que si se podía con el tiempo… Intenté relaciones posteriores pero fue inútil…. Sigo sola por elección ahora.
No sé cómo hacen algunas personas para terminar una relación y empezar otra convivencia tan rápidamente, no lo sé. Pero hay que reconocer que hay gente así.
Cuando miro a los adolescentes, a mis propios hijos, lanzarse al amor , con tanta espontaneidad, naturalidad y osadía, francamente los admiro!
Los admiro porque no están calculando nada ni midiendo riesgos, se arriesgan, se lanzan al amor.
Los adultos actuamos a veces con una inadecuada mesura, tan extremista, que nos negamos la posibilidad de “jugarnos” por un amor y eso nos lleva al fracaso en el ámbito, tal vez más importante de la vida: el afectivo.
Cuando hay hijos en el medio, esa “mesura” se torna doblemente dura para nosotras y difícil de resolver sin ayuda adecuada. ( la que mejor nos permita  ver con claridad la decisión más acertada).
No he vivido nunca la experiencia de tener una amistad verdadera con un hombre. Por qué lo digo? Porque siempre está contaminada con el deseo o la atracción física. Me sucedía en mi adolescencia y me sucede ahora.
Los hombres se me acercan diciendo lo mismo que hace 36 años, con diferentes palabras, pero mentirosas al fin: “me gustaría ser tu amigo”. En verdad lo que buscan es tener una” historia ” conmigo. Pero yo quiero volver a enamorarme. Podré?
A veces  escucho a algunos hombres decir que hoy las mujeres somos “fáciles” o “regaladas” pero yo  creo que hay más hombres solos “regalados” , que no se respetan a si mismos ni respetan a los demás, que únicamente buscan pasar el rato, sin compromisos y en ese intento dilapidan el poco o mucho dinero que tienen, su tiempo, su salud a veces en vez de  apostar por el amor que no se compra ni vende, que se lo gana “siendo”,porque es más importante “ser” que parecer”
Tal vez haya que mirar con más atención a nuestro alrededor, quizás entre esos que dicen amarnos, esta escondidito ese “loco amor” que soñamos y esperamos. Seguramente que  si hay varios revoloteando alrededor nuestro “alguien” tiene ciertamente un sentimiento sincero hacia nosotras y es posible que despierte de pronto nuestro corazón dormido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario